Como la brasa inerme espera al viento, como el soplo nocturno incendia su vientre descuidado, y lo alza y lo prende, y largas horas lo tiene envalentonado y frágil; como aún respira en la ceniza la memoria de lo ardido, así te cito en esta tarde imperfecta.
Te digo ven, vienes, aparecemos, se respira mejor el frío de diciembre, y en su silencio damos lugar al milagro.
Bajan sucias las aguas, restos de hoguera lamen la orilla: con ellos va cuanto debió arder en nosotros, cuanto arrasó nuestras vidas con su lumbre cotidiana, cuanto no arderá ya en las calderas ciegas del corazón.
Tú estás aquí, tengo en mis manos tus cabellos y un largo frío compartido. Como el viento y las brasas, también nosotros estamos aquí. A fuerza elementos de un paisaje que en nosotros nace y se destruye.
"Como la brasa" de Daniel Casado.
Daniel Casado nace en Cáceres en 1975. Además de El viento y las brasas, tiene publicado dos libros más: Me acuerdo (De la luna libros, Mérida, 1999) junto al poeta Elías Moro, que supone un homenaje al escritor francés George Pèrec y El largo andar tan breve (Ediciones Vitruvio, Madrid, 2003) Premio Ciudad de Mérida de Poesía. Asimismo, tiene dos libros inéditos El proyector de sombras y Ensayo de la pobreza, éste último de próxima publicación. Ha colaborado, entre otras, en las revistas El Espejo, La luna de Mérida y Druida así como en multitud de revistas electrónicas donde además ejerce la crítica musical. Es coordinador de la revista El Espejo, de la Asociación de Escritores Extremeños. En la actualidad prepara Oscuro pez del fondo (poemas) y Tratado de orientación a distancia (textos).