Este es el primer libro de narraciones de Olga orozco, pero todos los que saben que su voz es una de las más altas de la poesía argentina contemporánea reconocerán en estas prosas un territorio distinto del mismo dominio. Porque la creación es para Olga Orozco ese "juego peligroso" por excelencia, ese riesgo que pone en duda todo el sistema de pálidas apariencias que se nos quiere imponer como realidad, para arrojarse, con la ardiente lucidez de un cartógrafo renacentista, a medir lo desconocido, a develar (con respeto y fruición) las formas de lo oculto. La oscuridad, efectivamente, es otro sol, pero son pocos quienes pueden reconocerla como tal, quienes pueden adentrarse en su inquietante topografía, ver a la luz de sus sombras. Con elegancia y sensualidad, con certeza temible y también un humor recóndito, Olga Orozco se inscribe naturalmente en ese linaje que, de Achim von Arnim a André Pieyre de Mandiargues, conjuga el refinamiento verbal con la visión del revés de toda la trama.
Olga Orozco (Toay, La Pampa, 1920- 1999) fue una poeta argentina, cuya obra ha sido galardonada con numerosos premios, entre ellos, el Premio de Literatura Latinoamericana Juan Rulfo o el Premio Nacional de Poesía. Lo más importante de su producción se encuentra en los poemarios y de alguna manera en la obra que hoy presentamos, libro de prosas poéticas narrativas.